Las ventanas de tejado se han convertido en una solución imprescindible para quienes desean transformar un espacio oscuro y poco aprovechado en un lugar luminoso y acogedor. Con más de 80 años de experiencia en el mercado, estas ventanas no solo permiten hasta el doble de luz natural en comparación con las ventanas de fachada tradicionales, sino que también ofrecen múltiples opciones de diseño, apertura y materiales que se adaptan a cada necesidad. Elegir la dimensión correcta es clave para maximizar el confort, la eficiencia energética y el aprovechamiento del espacio bajo el tejado, y entender cómo interpretar las medidas disponibles puede marcar la diferencia entre una instalación exitosa y un proyecto que no cumpla con las expectativas.
Dimensiones estándar de las ventanas Velux: encuentra el tamaño perfecto para tu tejado
La selección del tamaño adecuado de una ventana de tejado es uno de los factores más importantes para garantizar un buen nivel de luz natural y ventilación en una habitación. Para determinar qué dimensión es la más apropiada, es fundamental considerar la superficie del suelo de la estancia. Una recomendación general y ampliamente aceptada es que la superficie acristalada de las ventanas de tejado debe representar al menos el veinte por ciento de la superficie del suelo de la habitación. Esto asegura que entre suficiente luz natural para crear un ambiente agradable y confortable sin generar un exceso de calor o pérdida energética.
Códigos de dimensiones Velux y cómo interpretarlos correctamente
Cada ventana de tejado cuenta con un sistema de codificación específico que permite identificar rápidamente sus dimensiones y características técnicas. Las ventanas fabricadas después de 1968 incluyen una placa de identificación que contiene información esencial sobre el modelo, las medidas y el tipo de apertura. Esta placa resulta especialmente útil cuando se trata de sustituir una ventana antigua, ya que permite identificar con precisión qué modelo se necesita para mantener la coherencia en la instalación. Los códigos de dimensión generalmente están compuestos por una letra y un número que corresponden a anchos y altos estandarizados. Por ejemplo, un código podría indicar una ventana de un tamaño determinado que se ajusta perfectamente a las necesidades de un espacio específico, facilitando tanto la selección como el proceso de compra y montaje.
Tabla completa de medidas disponibles según el modelo de ventana
Las opciones de medidas disponibles abarcan una amplia gama de tamaños que se adaptan tanto a proyectos de nueva construcción como a reformas de tejados existentes. Desde dimensiones compactas ideales para baños o pequeños espacios bajo cubierta, hasta ventanas de gran tamaño que pueden transformar completamente un salón o una oficina en casa, la variedad permite personalizar cada proyecto según las necesidades concretas. Es importante tener en cuenta que las ventanas de tejado se pueden instalar en tejados inclinados con pendientes que van desde quince hasta noventa grados, así como en cubiertas planas con inclinaciones inferiores a quince grados. Esta flexibilidad en cuanto a inclinación y tamaño hace posible que prácticamente cualquier tipo de construcción pueda beneficiarse de una ventana de tejado bien dimensionada y correctamente instalada.
Tipos de apertura y materiales: características que influyen en tu elección
La elección del tipo de apertura y del material de fabricación es tan relevante como la selección de la dimensión correcta. Cada sistema ofrece ventajas específicas que responden a distintas necesidades de uso, comodidad y estética. Entender estas diferencias permite tomar una decisión informada que garantice no solo funcionalidad sino también durabilidad y facilidad de mantenimiento a lo largo del tiempo.
Sistemas de apertura disponibles: manual, eléctrica y solar
El mercado ofrece principalmente tres tipos de sistemas de apertura para ventanas de tejado: manual, eléctrica y solar. La opción manual es la más tradicional y económica, ideal para ventanas ubicadas a una altura accesible donde la apertura y cierre no representa ningún esfuerzo adicional. Por su parte, las ventanas eléctricas ofrecen una comodidad superior al permitir el control remoto de la apertura y cierre, lo cual resulta especialmente útil en ventanas altas o de difícil acceso. Estas ventanas pueden integrarse con sistemas de domótica y sensores de lluvia que cierran automáticamente la ventana ante la detección de precipitaciones, evitando así posibles daños por entrada de agua. Además, existen modelos solares que funcionan mediante energía fotovoltaica, lo que elimina la necesidad de cableado eléctrico y facilita la instalación en cualquier ubicación del tejado. Los sistemas más avanzados, como los que incorporan sensores de temperatura, humedad y dióxido de carbono, permiten gestionar de manera inteligente la ventilación y el clima interior, mejorando significativamente el confort y la eficiencia energética de la vivienda.
Ventanas de madera versus PVC: ventajas y durabilidad de cada material
La elección del material de fabricación afecta tanto a la estética como al rendimiento térmico y la durabilidad de la ventana. Las ventanas de madera ofrecen un aspecto cálido y natural que se integra perfectamente en construcciones tradicionales y rústicas. Este material proporciona un excelente aislamiento térmico y acústico de forma natural, contribuyendo al confort interior. Sin embargo, requiere un mantenimiento periódico para proteger la madera de la humedad y los cambios climáticos. Por otro lado, las ventanas de PVC destacan por su resistencia a la intemperie, su bajo mantenimiento y su capacidad para ofrecer un buen nivel de aislamiento sin necesidad de tratamientos adicionales. Este material es especialmente adecuado para zonas con condiciones climáticas adversas o para quienes buscan una solución duradera y de fácil cuidado. Ambos materiales cuentan con diez años de garantía, lo que refleja la confianza en su calidad y durabilidad a largo plazo.
Aislamiento, acristalamiento y confort térmico en ventanas de tejado Velux

El rendimiento energético de una ventana de tejado depende en gran medida de las características del acristalamiento y del nivel de aislamiento que ofrezca. Estos factores son determinantes no solo para el ahorro en calefacción y climatización, sino también para el bienestar de los ocupantes de la vivienda.
Opciones de acristalamiento: doble y triple vidrio para máxima eficiencia energética
Las ventanas de tejado pueden equiparse con doble o triple acristalamiento, siendo ambas opciones altamente eficientes en términos energéticos. El doble acristalamiento consiste en dos láminas de vidrio separadas por una cámara de aire o gas inerte que reduce significativamente la transferencia de calor entre el interior y el exterior. Esta opción es suficiente para la mayoría de las viviendas y climas, proporcionando un equilibrio óptimo entre eficiencia y coste. El triple acristalamiento, que incorpora una tercera lámina de vidrio y una cámara adicional, está recomendado para zonas con inviernos muy fríos o para quienes buscan el máximo nivel de aislamiento térmico y acústico. Esta configuración reduce aún más las pérdidas de calor y mejora el confort interior al minimizar las corrientes de aire frío cerca de la ventana. Ambos tipos de acristalamiento están diseñados para maximizar la entrada de luz natural sin comprometer el aislamiento, lo que convierte a estas ventanas en una inversión inteligente para cualquier proyecto de construcción o reforma.
Factores de aislamiento térmico y acústico que mejoran el confort interior
Más allá del acristalamiento, otros elementos estructurales de la ventana contribuyen al aislamiento global del conjunto. Los materiales del marco, la calidad de los tapajuntas y el correcto sellado de las juntas son aspectos fundamentales para evitar filtraciones de aire y agua, así como para reducir las pérdidas de calor. Los tapajuntas, que conectan la ventana con el tejado, deben instalarse de manera precisa para garantizar una perfecta impermeabilización y evitar problemas de humedad. Además, las opciones de accesorios como persianas exteriores, cortinas venecianas o toldos solares no solo ofrecen control sobre la entrada de luz y calor, sino que también añaden una capa adicional de aislamiento que mejora el confort en verano e invierno. La combinación de un buen acristalamiento con estos elementos complementarios permite crear un ambiente interior agradable, silencioso y energéticamente eficiente durante todo el año.
Instalación y presupuesto: todo lo que necesitas saber antes de comprar
Planificar correctamente la instalación de una ventana de tejado es esencial para garantizar su correcto funcionamiento y durabilidad. Conocer los costes asociados y las consideraciones técnicas permite evitar sorpresas y asegurar que el proyecto se realice de manera profesional.
Costes aproximados según dimensiones y características técnicas
El precio de una ventana de tejado varía considerablemente en función de varios factores, entre ellos el tamaño, el tipo de apertura, el material del marco y el tipo de acristalamiento. Las ventanas manuales de dimensiones estándar y con doble acristalamiento suelen ser las opciones más económicas, mientras que las ventanas eléctricas o solares con triple acristalamiento y sistemas de control inteligente representan una inversión mayor. Además del coste de la ventana en sí, es importante considerar el precio de los accesorios complementarios como persianas, cortinas, toldos o mosquiteras, que pueden incrementar significativamente el presupuesto total. La venta online de repuestos y accesorios facilita el mantenimiento y la personalización de las ventanas a lo largo del tiempo. Para obtener un presupuesto detallado y ajustado a las necesidades específicas de cada proyecto, es recomendable consultar con un asesor especializado o un instalador oficial que pueda evaluar las características de la vivienda y proponer las soluciones más adecuadas.
Proceso de instalación profesional y consideraciones estructurales del tejado
La instalación de una ventana de tejado es una intervención que requiere experiencia y conocimientos técnicos específicos. Antes de iniciar el trabajo, es fundamental realizar una evaluación estructural del tejado para asegurarse de que soportará el peso de la ventana y que la inclinación es adecuada para el modelo seleccionado. Como se mencionó anteriormente, las ventanas pueden instalarse en tejados con inclinaciones desde quince hasta noventa grados, lo que ofrece gran flexibilidad en la mayoría de las construcciones. El proceso de instalación incluye la apertura del hueco en la cubierta, la colocación del marco, la fijación de los tapajuntas y el sellado de todas las juntas para garantizar la estanqueidad. Un instalador oficial cuenta con la formación necesaria y el respaldo de academias especializadas que ofrecen cursos y recursos técnicos actualizados. Además, trabajar con un distribuidor e instalador oficial garantiza el cumplimiento de todas las normativas de seguridad y la validez de la garantía del fabricante. En proyectos de reforma, renovación de áticos, extensiones o nueva construcción, contar con un profesional cualificado es clave para lograr resultados duraderos y de alta calidad.
